Todas sabemos lo importante que es nuestro cabello: largo, corto, rizado o teñido, es un elemento importantísimo en las mujeres. Nos forja personalidad y seguridad; para muchas puede ser nuestro principal atractivo.
Sin embargo la edad nada perdona y este es un elemento que se deteriora a lo largo de nuestras vidas. Algunos tratos que le damos van en detrimento de la salud de nuestro cabello y cuero cabelludo, por ejemplo el planchado constante, las visitas con el secador e incluso los tintes, pueden dañar de forma parcial nuestro cabello.
En este artículo te mostraremos una forma natural de cuidar tu cabello, sobre todo en la lucha contra su caída, que muchas veces no depende necesariamente de la edad. Los métodos naturales son más efectivos y sanos, ya que algunos tratamientos químicos tienden a ser muy agresivos con el cuero cabelludo.
Cabello sano al natural
Enjuague de salvia y vinagre: la salvia y el vinagre de manzana, contienen propiedades que colaboran en el fortalecimiento de tu cabello. Para preparar un enjuague que te ayude en este problema debes hacer lo siguiente: utiliza una taza de té de salvia, mezcla con tres cucharadas de vinagre de manzana, hasta encontrar una forma homogénea. Vierte sobre el cabello, dando masajes profundos y deja actuar unos 10 minutos, y enjuaga. No recomendable para cabellos rubios y claros.
Zanahoria y Leche de Coco: estos productos naturales son poderosos contra la caída del cabello. Mezcla en proporciones iguales y bien trituradas y coloca sobre el cabello; deja actuar durante 15 minutos y enjuaga con abundante agua.
Aceite de Almendras Dulces: este es un remedio casero muy común, popular desde el antiguo Egipto. Mezcla gotas de este aceite con gel de Aloe Vera, deja actuar este gel por un par de hora sobre tu cabello y luego enjuaga profundamente
Aceite de Romero: utiliza este aceite con tu Champú en los ciclos de limpieza que le dedicas a tu cabello.
Como hechizo de una bruja: para este remedio, cuasi tenebroso, debes contar con seis huesos con medula, luego le pones a hervir, hasta lograr que la médula se derrita, agrega aceite de ricino. Deja reposar y enfriar para llevarlo a la nevera, esta mezcla debes usarla una vez por semana en ciclos de 30 minutos.
Jarabe de Algas: para este remedio debes contar con: un litro de vino blanco, 30 gramos de algas agar-agar, hijiki y kombu. Mezcla el vino con las algas y ponlo a hervir a fuego lento. Luego debes colocarlo en un frasco y sellado heréticamente, lo deja reposar en un lugar seco y oscuro por tres días; posteriormente calienta nuevamente el frasco y cuela el líquido y mézclalo con melaza en proporciones iguale. Se recomienda hacer tres tomas de este jarabe al día, preferiblemente, antes de cada comida.
Comparte este interesante artículo y lucha contra la caída del cabello prematuro y no tan prematuro. Cabello sano al natural con 6 fáciles consejos.